Autillo de Campos
LA VILLA DE LOS SIETE REYES
31 de diciembre de 2024
3 de diciembre de 2024
Una torre periscópica para Tierra de Campos en Autillo
El Consistorio autillano quiere construir una cámara oscura en lo alto del edificio, a más de 40 metros. Gracias a un juego de espejos ofrecerá una visión de 28 pueblos en un radio de 30 km.
Contemplar la inmensidad de Tierra de Campos a través de una cámara oscura desde un mirador ubicado a más de 40 metros de altura. Este es el proyecto que tiene entre manos el Ayuntamiento de Autillo de Campos, que trabaja en la musealización de la torre de la iglesia de Santa Eufemia, que el Obispado ha cedido al Consistorio por un período inicial de 25 años.
La iniciativa contempla diferentes salas temáticas en cada una de las alturas del inmueble, de modo que el turista pueda acceder a información sobre el pueblo y su entorno más inmediato a medida que va aproximándose a la parte más alta, ubicada a 42 metros. Así, una de las plantas estaría dedicada a la comarca a modo de centro de interpretación, en una segunda el hilo conductor sería la historia local y en la tercera el viajero tendría la oportunidad de interactuar con las campanas del edificio, que tiene la particularidad de que es exento.
Finalmente ascendería a la cuarta y última planta, donde se ubicaría el elemento estrella: una cámara oscura que transformará el edificio en una torre periscópica que permitirá una visión en 360 grados gracias a un sistema de espejos que se proyectan en el interior en un gran receptor. Allí se ofrecerá una impresionante vista de un radio de 30 kilómetros, que incluye 28 pueblos (algunos incluso de la vecina provincia de Valladolid como Medina de Rioseco), palomares y el contraste propio de las tierras de cultivo. Además, y como punto de partida, también se adecentarán las escaleras de acceso, para garantizar la seguridad de los visitantes.
Se trata de una iniciativa pionera en la provincia que el alcalde del municipio autillano, Ángel Castro, califica como un «proyecto innovador» que supondrá un «empujón» para la promoción turística de toda la comarca al apostar por un «recurso diferenciador» con el que se pretende captar la atención del viajero que apuesta por destinos de interior alejados de la oferta de sol y playa. No solo eso, pretende que también los propios palentinos se acerquen hasta la futura dotación.
El Ayuntamiento busca ahora la financiación necesaria para llevar a buen puerto el proyecto, valorado en unos 350.000 euros. Así, está a la espera de la inminente resolución de una convocatoria de la Junta de Castilla y León y ha llamado también a la puerta de la Diputación y del director general de Patrimonio en busca de colaboración económica. «Es un proyecto de mandato. Cuando nos presentamos en estas últimas elecciones municipales de 2023 se propuso esta idea y se está trabajando desde el primer día en conseguirla», explica a Diario Palentino Castro, quien confía en recibir «buenas noticias» antes de que acabe el año «para que el proyecto vea la luz cuanto antes».
UNIÓN INTERMUNICIPAL
En tanto en cuanto la torre periscópica va tomando forma, Autillo de Campos trabaja en la constitución de una nueva asociación intermunicipal que conecte los pueblos de Tierra de Campos para la promoción conjunta de los recursos y riquezas que atesora este rincón de la provincia. A la misma se sumarán, además del propio Autillo, Frechilla, Mazuecos de Valdeginate, Boadilla de Rioseco, Castromocho, Capillas, Guaza, Abarca, Boada y Meneses de Campos.
«Trabajaríamos todos juntos por el beneficio común, como ya ocurre con el Museo Territorial Campos del Renacimiento», asevera Castro, quien asegura que lo que se persigue con esta acción es darse a conocer entre el gran público. Y es que, según pone de manifiesto, «no es solo beneficioso para cada uno de los municipios por separado, sino que repercute tanto en el bien común de todos ellos como en el de los vecinos que en ellos habitan».
Así, cada uno de estos pueblos tendrá la oportunidad de vender los atractivos turísticos, históricos, culturales o naturales en los que quiera poner especial énfasis. Por ejemplo, en el caso de Autillo estaría vinculado al patrimonio en un pueblo donde se proclamó en junio de 1217 a Fernando III rey de Castilla, tan solo un par de semanas antes de su coronación solemne en Valladolid entre el 2 y 3 de julio de ese mismo año.
Además, se pondría el foco en el patrimonio que alberga la propia iglesia (siglo XVI), como son el órgano de estilo barroco sobre un mueble neoclásico de 1827 obra de Ramón Guerra (último discípulo del reputado organero Tadeo Ortega), el gran retablo mayor de Pedro Bahamonde fechado en 1732, una pintura del Crucificado de fines del siglo XVI, una escultura de San Antonio de Padua de mediados del siglo XVIII, una tabla de predicación del Bautista ante Herodes relacionada con el maestro de Becerril y, la que puede considerarse el gran tesoro del templo, una pintura de la Transfiguración del Señor, copia de Rafael, de fines del siglo XVI.
«En Autillo tenemos un bar y si queremos que siga abierto, hay que tomar un café en ellos o comer. Por eso apostamos por la torre como un nuevo reclamo turístico que atraiga gente al pueblo, como ya lo hace la recién estrenada área de autocaravanas», asevera el primer edil en declaraciones a este periódico.
23 de noviembre de 2024
Localizado el lugar exacto donde proclamaron rey a Fernando III en Autillo
Escena sobre azulejo en la Plaza de España de Sevilla, ambientada en Autillo de Campos pero que por error dice que sucedió en Nájera (La Rioja), se ve a Fernando III proclamado rey de Castilla bajo un olmo
En el Diccionario Geográfico de Madoz de 1850 se dice textualmente que: Sus naturales [los de Autillo] se engrandecen con el orgullo de haber sido sus antepasados los primeros en proclamar a don Fernando III, según resulta de una inscripción con letras de oro que se halla en la ermita que se ha mencionado, titulada del Castillo, en la que se lee “En este pueblo y en este sitio fue proclamado rey por primera vez, don Fernando III llamado el Santo”.
Como Fernando III fue beatificado en 1655 y después canonizado en 1671, es evidente que esa inscripción es posterior a esta última fecha. Pero creemos que la ubicación de la ermita como lugar de su proclamación, bajo un olmo, como rey de Castilla en 1217, es perfectamente posible y lógica por las razones que vamos a exponer:
Las advocaciones de Nuestra Señora del Castillo en Tierra de Campos, está demostrado que están relacionadas con los primeros momentos de la Reconquista. Suelen ser pequeñas iglesias en lugares elevados respecto a su entorno, donde se construyeron las primeras cercas de defensa, de ahí el nombre de virgen del Castillo. Luego, cuando iba creciendo la población, se fueron creando nuevas iglesias parroquiales, más grandes, a las afueras del creciente vecindario, tal como sería el caso de Autillo de Campos.
Sabíamos por tradición oral en el pueblo desde hace 175 años, que nuestra ermita estaba situada en la acera norte de la actual calle del Castillo, y esa zona es precisamente la más elevada del pueblo, en un suave promontorio a solo dos tiros de piedra del río. Es el sitio ideal para establecer la primera cerca de defensa del pueblo y colocar ahí su primera ermita o diminuta iglesia. También sabemos que la proclamación de San Fernando fue bajo un olmo, y ese es un árbol de ribera que solo crece muy cerca de los ríos, como es nuestro caso.
Por tanto solo restaba demostrar documentalmente la ubicación de la desaparecida ermita. La tradición oral desde hace 175 años, que hoy sabemos bien fundada, nos decía que la ermita debía estar en las puertas traseras de la casa de Covadonga Gutiérrez Castro y Vidal Serna García, en la calle del Castillo, aunque la entrada principal de ese inmueble urbano es por la calle Pósito, primero de los números impares actuales, número tres de los antiguos. Por tanto esa casa se ha ido ampliando hasta unir hoy ambas calles.
Para este trabajo de investigación los autillanos le debemos agradecer la más que extraordinaria gentileza de dos archiveras, cuyo nombre quiero destacar por orden cronológico: Almudena Iglesias Matía, oficial del Registro de la Propiedad de Frechilla, natural de Fuentes; y Anunciación Blanco Fernández, trabajadora ejemplar del Archivo Histórico Provincial de Palencia. Ambas me ayudaron mucho más de lo que les demanda su oficio público, e incluso trabando por la tarde fuera de horario laboral.
Gracias a ambas archiveras he podido averiguar que Covadonga y Vidal le compraron su casa a Graciano Martín Lobejón (+1921), que la heredó de su hermana Gabriela Martín Lobejón (1914-1980). A su vez ésta la compró a los hermanos Basilio (1874-1953) y Quintín Vega Prieto (1866-1942). Ambos hermanos eran herederos de Agustín de Vega Sevilla (1833-1916). Agustín era convecino de Juan José Pedrosa Herrero (Villafrades, fallecido en Autillo en 1865), a quien le compró su casa en 1860. Este Juan José Pedrosa Herrero fue quien compró el 15 de julio de 1855, junto a Gregorio Asensio Jubete (1807-1862), el solar en “el corro” de la ermita de Nuestra Señora del Castillo. Esta ermita, que sabemos que ya era un solar en 1850, fue vendida por el descendiente del último señor de Autillo. Este solar con un pequeño valor de 300 reales, estaba situado en el corro, y lindaba por norte y el este con el corral y pajar de los citados Juan José y Gregorio, y lindaba por el poniente con casa de Salvador Gil Domínguez (1807-¿?). También sabemos de otra escritura, que no tiene que ver con ésta, del 11 de septiembre 1850, donde Lázaro García Domínguez, vecino de Valoria del Alcor, le vende una casa en “el corro” a Salvador Gil Domínguez. Lindaba al sur con casa de Julián (¿Juan?) Reguero, al oeste lindaba con corral de Ángela Domínguez, y al este con el solar de la ermita del Castillo y corral de Ramón Calonge.
Gracias a esta escritura de venta sabemos que la ermita era de José Hermosa y Urbina, V marqués de Grimaldo y XXIV “señor de Autillo, vecino de Valladolid”. El marqués estaba casado con Petra Muñoz Frías, y sucedió a su padre Ginés Hermosa y Campos en 1845.
Área aproximada de dónde pudo haber estado situada la ermita. Hipótesis aún sin desarrollar
Detalle de la escritura de venta del solar de la ermita de Nuestra Señora del Castillo, 15-7-1855, protocolo del AHPP nº: 13.243
El valor del solar era tan escaso, 300 reales, que el marqués de Grimaldo ni se vino en persona a Autillo para formalizar la venta, por lo que firmó en su nombre su administrador en Autillo, Marcelino Bueno.
El dato de que la ermita era de los señores de Autillo explica que sus gastos no aparezcan en los libros de la parroquia, y por tanto son escasos los documentos históricos que tenemos de ella, y por el momento se desconoce dónde se hallan los archivos de esta familia, si es que existen.
Pero el hecho de que sepamos que la ermita era patrimonio del señorío, le añade mayor verisimilitud a que la ermita del Castillo fuese el lugar donde se hallaba cercano el olmo de la proclamación. Los olmos además son árboles centenarios y nada tiene de extraño que el lugar exacto de la proclamación fuese señalado por el árbol durante varios siglos. Si la tradición oral de 175 años se ha mantenido viva y exacta en Autillo durante casi dos siglos, la memoria de la ubicación del olmo creemos que pudo ser aún más dilatada, y más si estaba junto a la ermita, presuntamente ya construida en 1217. En cualquier caso, sabemos que la devoción especial que se le tenía por parte de los señores del pueblo a la virgen del Castillo en Autillo está ya documentada en 1354, cuando doña Inés Alfonso de la Cerda, esposa de Fernando Rodríguez de Villalobos, VII señor de Autillo, dice en su testamento "E otrosí, don Fernando Rodríguez, mío marido y yo, oviemos a dar una vestimenta que valiese doscientos maravedíes a Santa María del Castiello en Autiello, que nos lo mandaron en penitencia".
Con la venta de la ermita en ruinas en 1855 comenzó el proceso de ventas de todos bienes del titular del mayorazgo, que finalizó en 1882, repartidos entre Pío Hermosa (nac. Palencia 1842) y su hermano César, sexto marqués de Grimaldo (Valladolid, 1846-1909 aprox.). En total se desprendieron de 305 hectáreas del mayorazgo de Autillo, un 10% de todas las fincas del pueblo, además del “palacio”.
OTRAS CONSIDERACIONES
* Creemos que no es casual el hecho de que la calle más recta y principal del pueblo, la calle del Medio, tengan esas características, ya que comunicaba directamente la ermita y la nueva iglesia medieval, hoy desaparecida bajo la actual de 1598. Por tanto esa calle principal comunicaba de forma intencionada los dos centros de adoración religiosa más importantes, la ermita y las iglesias, la vieja y la nueva.
* En el corral de Covadonga y Vidal aparecieron unos cimientos o muros en el subsuelo, de un metro de anchura aproximada, hechos de ladrillos macizos, compatibles según testimonio de estos propietarios con elementos constructivos propios de iglesias o ermitas muy antiguas.
Interior del corral donde se aprecia la zona donde aparecieron en el subsuelo los presuntos restos de la ermita de Nuestra Señora del Castillo
* El retablo del siglo XVI y la imagen de la virgen del Castillo del siglo XIII, fueron trasladados hasta su lugar actual, lado de la epístola, donde arranca la escalera de acceso al coro alto.
* Este artículo es solamente el primero de varios que se escribirán en el futuro. Animo de forma expresa a cualquier historiador a que complete este primer trabajo, ya que por mi lugar de residencia no me resultará tan fácil perfeccionarlo como se merece. Consideraré un honor personal si alguien toma mi relevo.
* Además de a Covadonga, Almudena y Anunciación (citadas más arriba), deseo resaltar toda la ayuda, información y la simpatía que he recibido de Judit Asensio Aparicio y su padre Carmelo Asensio Vargas. Es un placer trabajar en equipo con ella, y es una gran autillana.
Por Marcial de Castro Sánchez, Granada a 22 de noviembre de 2024.
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